Hablan mis no lágrimas más que mis palabras de mi ser.
Y estos escritos no son más que la sombra de una noche en vela, triste música y recuerdos.
Recuerdos, mi amor, recuerdos de un instante, un pequeño orgasmo en una inmensidad azulada y gris.
Una pequeña, minúscula, llama se extendió en mi interior y lo destruyó todo y forjó en mí esta angustia, inquietud. Son ella y sus cabellos. Son sus labios, el calor de su pecho, su aliento de rosas.
Es su lejanía a la perfección aquí descrita.
Demencia, soñada locura que me lleva a tal atrevimiento: describir un rasgo suyo.
Recuerdos, mi amor, recuerdos de un instante, un pequeño orgasmo en una inmensidad azulada y gris.
Una pequeña, minúscula, llama se extendió en mi interior y lo destruyó todo y forjó en mí esta angustia, inquietud. Son ella y sus cabellos. Son sus labios, el calor de su pecho, su aliento de rosas.
Es su lejanía a la perfección aquí descrita.
Demencia, soñada locura que me lleva a tal atrevimiento: describir un rasgo suyo.
Es mi no morir,
amor que no eres mío.
Es la belleza que nunca supe ver y
la vida cambiante,
sinuoso y melancólico sendero.
amor que no eres mío.
Es la belleza que nunca supe ver y
la vida cambiante,
sinuoso y melancólico sendero.
Son palabras escritas en una noche verde oscuro y mi no cambiante realidad. Mi impotencia y mis inútiles palabras.
Eres tú
y son mis cadenas.
Fin.
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